viernes, 29 de enero de 2016

Hay horas mejores que otras, días, semanas e incluso años.
Ayer me desperté en un día peor que otros y cada minuto se hizo eterno.
Estoy intentando sobrevivir a este mundo, intentando adaptarme y no ser una dinosaurio más.
Supongo que me deprimió un artículo sobre el mundo editorial que decía que sin importar lo bien que escribas, si no tienes a alguien adentro, puedes morir esperando que te descubran porque probablemente nadie lea tus manuscritos. En fin, es difícil esto de querer hacer algo poco tradicional.

No hay comentarios:

Publicar un comentario